La dermatitis atópica es una enfermedad inflamatoria crónica y recurrente de la piel. Cursa con periodos de agudización (brotes). Los síntomas son picor intenso, enrojecimiento, piel seca y descamación. A veces incluso con exudación y formación de costras.
¿A quién afecta? ¿Donde aparece ?
Suele aparecer en el lactante, aunque se manifiesta con mayor intensidad y frecuencia en niños (un 10% y 70% antes de 5 años). Afortunadamente la dermatitis atópica se resuelve sola tras la pubertad, pero hay casos que son más graves y que pueden durar hasta la edad adulta.
Los niños que la padecen presentan mayores niveles de estrés y ansiedad: duermen menos por las noches (el picor puede ser intenso), los padres y ellos mismos están en vigilancia permanente de los alimentos que toman por si alguno en particular la empeora, y de los productos que tocan, las condiciones ambientales, y un largo etc. que trae de cabeza a toda la familia.
Sabemos que hay más atopía en niños obesos, ya que el tejido adiposo no es sólo un almacén o un aislante frente al frío, es también un órgano neuroendocrino que segrega muchas sustancias que disminuyen la tolerancia inmunológica a diferentes antígenos favoreciendo el desarrollo de enfermedades como la dermatitis atópica.
Las áreas afectadas en lactantes suelen ser mejillas, frente, cuello y parte superior de espalda. En niños aparece en los pliegues internos del codo, rodillas, muñecas, cuero cabelludo, etc. En adultos, la nuca, laterales del cuello, dorso de los pies y muñecas.
¿Por qué aparece?
Las causas son muchas y complejas, por un lado está el componente genético que favorece la alteración de la barrera cutánea y una respuesta inmune anómala en la piel frente a las infecciones y factores ambientales.
¿Cómo tratar la dermatitis atópica?
En brotes
Corticoides tópicos, inmunomoduladores, antihistamínicos vía oral etc. combinados con coadyuvantes que restauren y mantengan en buen estado la barrera hidro-lípidica de la piel.
Siempre y entre brotes
- Evitar ambientes contaminados o demasiado secos. Puede ser útil un humidificador en invierno.
- Reducir cambios bruscos de temperatura frio calor, sudoración excesiva, vestir tejidos transpirables, como algodón o lino (lavarlos con jabones suaves).
- Limitar algún alimento o producto si produce o se sospecha que produce alergia.
- Para la higiene diaria, realizar una ducha templada, sin esponja o muy suave empleando jabones sin detergentes, específicos de atopía.
- Evita baños prolongados y en la piscina o playa puedes aplicar antes Exomega Crema Barrera para minimizar el contacto con la sal, cloro o alguicidas. Si son en casa (10 min max.), podemos añadir al agua aceites. Secar con toques, toallas suaves, nunca frotar.
- Mantener la piel en las mejores condiciones posibles, aplicando a diario y mínimo 2 veces, productos específicos, clínicamente testados, con fórmulas avanzadas ricas en ingredientes emolientes y activos calmantes, de buena tolerancia y sin excesivos conservantes y sin alcohol.
Os propongo las Lineas Aderma, Xeracalm y Nutratopic.
- Evitar el rascado para evitar empeoramiento de la lesión y posibles sobreinfecciones. Conviene que los niños lleven las uñas cortadas. En caso de picor intenso, existen productos con pramoxina que aliviarán inmediatamente.
Quiero daros una dosis extra de paciencia, la piel necesita sus cuidados y un tiempo para estabilizarse. Espero haber solucionado vuestras dudas y os animo a compartir vuestras experiencias sobre la Dermatitis Atópica.